La labor de las empresas importadoras y comercializadoras es ardua, a menudo los empresarios se tienen que dividir entre las actividades para hacer crecer los negocios y entre velar el cumplimiento de la ley, a menudo es complicado y no queda otra más que confiar en lo que hacen las personas encargadas de esas labores, pero ¿qué pasa si dichas personas no cuentan con el conocimiento ni la experiencia necesaria?, en la realidad son muy pocas las empresas que se preocupan por evitar problemas, la inmensa mayoría solo resuelven como pueden los imprevistos.